Preocupada se encuentra la comunidad del barrio La Pradera por los problemas de contaminación causados por un extraño líquido que sale de dos alcantarillas ubicadas en la carrera 31A1 con calle 125.
“Es un fuerte olor a productos químicos, además de la presencia de una sustancia oscura por establecer. La Policía Ambiental se percató de la situación que viven las personas y las afectaciones de salud que se registran ante este vertimiento de aguas malolientes”, señaló un representante de la comunidad.
La comunidad agradeció a la Policía Metropolitana por haberlos escuchado y le pidieron que través de la visita realizada en el sector puedan direccionar el caso a las autoridades distritales.