La Dirección General Marítima, autorizó el reinicio de las operaciones en el puerto de Barranquilla después de un riguroso análisis por parte del equipo técnico de la Capitanía y los pilotos prácticos por la situación actual, donde permanece encallado un buque quimiquero.
Fue así como se autorizó la realización de algunas maniobras de zarpes con un estricto seguimiento y control. En esta ocasión zarpó a Santa Marta la motonave “Calypso” de 171.99 de eslora (longitud), 27,6 de manga (ancho) y un calado de 7.9 metros, sin novedad alguna.
Entre tanto, los técnicos de la Dimar decidieron suspender cualquier maniobra de salvamento del buque “Nordic Wolverine”, que se encuentra encallado en la frente a la piña del tajamar occidental, en Bocas de Ceniza.
Esta decisión se mantendrá hasta que se tenga un completo análisis sobre lo que se debe hacer de forma segura. Todo ello debido a que el buque transporta productos químicos que podrían afectar el medio ambiente.
