Un patrullero de la Policía Metropolitana, en el barrio Rebolo, sacó su arma para intimidar a personas que se encontraban violando el las medidas sanitarias contra el COVID-19, en un sector del arroyo que atraviesa esa zona de la ciudad.
Como el uniformado se encontraba mojado por la lluvia que caía, en la tarde del jueves, el arma se le resbaló de las manos y cayó a la corriente.
Según conoció Emisora Atlántico, aún este viernes continúan buscando el arma de dotación del policía.