Una fiscal de la Dirección Especializada contra las Violaciones a los Derechos Humanos obtuvo declaraciones y otros elementos de prueba que dan cuenta de la posible participación de Noralba Vasco en las actividades de tipo sexual contra varias menores de edad, que fueron víctimas del exjefe paramilitar Hernán Giraldo Serna, conocido como ‘El Patrón’, ‘El Viejo’, ‘Taladro’ o ‘El Señor de la Sierra’.
La mujer fue la empleada, cocinera, confidente, amiga y la encargada de custodiar el dinero del entonces cabecilla del mal llamado Bloque Resistencia Tayrona de las extintas AUC. En cumplimiento de esas tareas, al parecer, captoì, trasladoì y acogió, por lo menos, cuatro niñas que fueron sometidas a distintos vejámenes entre 2005 y 2006.
Esta persona, presuntamente, ubicoì a las menores de edad, de 11 y 12 años, en corregimientos de Santa Marta (Magdalena) y las llevoì a las fincas que frecuentaba Giraldo Serna antes de su desmovilización, en febrero de 2006. La investigación da cuenta de que las habría persuadido para que accedieran a los propósitos sexuales, y les proveía ropa y otros elementos para que permanecieran a su lado.
Los registros de las cárceles de La Ceja e Itagüíì (Antioquia), y La Modelo de Barranquilla (Atlántico), donde estuvo Giraldo Serna, evidencian múltiples ingresos de las niñas. La hoy procesada, al parecer, presentoì documentos en los que se hacía pasar como la mamaì o indicaba que eran ahijadas del denominado ‘Señor de la Sierra’, entre otras maniobras.
Para la Fiscalía, Noralba Vasco, presuntamente, sacoì provecho económico de las agresiones sexuales contra las menores de edad e incurrió en conductas de violencia basadas en género. En ese sentido, fue acusada por los delitos de trata de personas agravada y explotación sexual agravada.