La megaobra del Canal del Dique se constituye en uno de los proyectos más importantes para la mitigación de los efectos del cambio climático que se ejecutan en el país.
De los 10 componentes que se van a ejecutar, 9 corresponden a la sostenibilidad y recuperación ambiental, y el otro es el relacionado con el fortalecimiento de la navegabilidad.
Así se pudo apreciar luego de un recorrido que se hizo este jueves por parte de un grupo de periodistas de la región Caribe y de la capital de la República.
A bordo de la embarcación Pasanku, EMISORA ATLÁNTICO acompañó este recorrido a lo largo de 115 kilómetros a través del canal del Dique desde Calamar, Bolívar, hasta llegar a la bahía de Cartagena.
Se conoció inicialmente que la obra contempla la extensión de la muralla de protección en el punto de partida de este cuerpo de agua. Igualmente un sistema de compuertas y dos esclusas para mejorar la navegabilidad y controlar el nivel de las aguas, expresó el ingeniero Germán De la Torre, gerente de la concesión Ecosistema del Dique.
El proyecto busca prevenir las inundaciones que se presentaron en el año 2010, mediante control del caudal. La infraestructura que se va a construir va a hacer este control de la cantidad de agua evitando que en la temporada de lluvia se desborde el canal.
En la actualidad se está en la fase de reconstrucción y se avanza en el estudio previo y la actualización ambiental para tener un instrumento fuerte para iniciar los trabajos que están contemplados dentro de 18 meses después de la adjudicación.
$340 mil millones en inversiones sociales contempla el megaproyecto del Canal del Dique
La megaobra del Canal del Dique contempla una inversión de 340 mil millones de pesos para el componente social que beneficiará a 19 municipios de los departamentos de Atlántico, Bolívar y Sucre.
Así lo precisó Carlos Rosado, directivo de la firma Sacyr, entidad encargada de ejecutar la obra de recuperación de los ecosistemas degradados en este cuerpo de agua. Se adelantarán varios proyectos productivos, mejoras en infraestructura en salud, escuelas y la capacitación para que la comunidad tenga la formación que se requiere para acceder a los empleos locales.
En este sentido, son unos 60 mil empleos directos e indirectos y lo que se quiere es aprovechar lo que cada uno de los integrantes de estas comunidades sabe hacer para que participen de la oferta laboral.
De igual manera recibirán formación técnica para sus proceso de producción agropecuaria que mejoras sus condiciones económicas, dijo Carlos Rosado.
Para ello se brinda apoyo con entidades como el Sena para la preparación del personal que va a vincularse a la obra.