La Junta Directiva de la Asociación de Educadores del Atlántico -ADEA-, expresó su preocupación e hizo un llamado a las autoridades para suministrar explicaciones y buscar soluciones a graves problemáticas que vienen afectando la culminación, en condiciones de normalidad, del calendario académico de 2023.
Para ADEA resulta inconcebible, por ejemplo, que más de un año después (septiembre de 2022) de que se convirtiera en noticia nacional la forma en la que a través del techo se inundaba el comedor de la IED Brisas del Río y que la Administración Distrital adelantara a través de contratistas obras en la precitada escuela, la situación ya presentada vuelva a repetirse y que tras el fuerte aguacero presentado sobre la ciudad en las últimas horas, una parte de las obras colapse y vuelvan a presentarse situaciones que dejan mucho que pensar sobre la calidad de los trabajos, sobre las labores de interventoría y sobre la actuación y vigilancia efectiva de los órganos de control.
Del mismo modo para ADEA es grave que sin finalizar el año escolar se presenten, no sabemos si por falta de previsión en la contratación o presupuestales, interrupciones en algunas instituciones de los programas de alimentación y de transporte escolar que afectan población estudiantil vulnerable que debería ser objeto de especial protección por parte de las autoridades del Distrito de Barranquilla.
ADEA hace un llamado a aplicar las pólizas de garantía frente a incumplimientos de contratistas y obras que no cumplan con estándares mínimos de calidad y a que los órganos de control cumplan con sus objetivos misionales y ejerzan especial inspección y vigilancia sobre recursos públicos de educación.