Durante la reunión de alcaldes con el gobernador en la que se analizó los efectos del Fenómeno de El Niño, se conoció que al menos ocho municipios del Atlántico sufren por deficiencias en el suministro de agua potable.
Uno de los más afectados es el corregimiento de Puerto Giraldo, en Ponedera, en donde el alcalde Aristarco Romero, expresó estar en emergencia sanitaria ante por la carencia de preciado líquido.
Igualmente la situación no es nada fácil para las comunidades de Manatí, Campo de la Cruz, Suan, Candelaria, Luruaco Repelón y Santa Lucía.
Los alcaldes de estas poblaciones han expresado que las fallas obedecen a condiciones técnicas por parte de los prestadores del servicio de agua.
