Gracias a operativos simultáneos adelantados en Barranquilla, previos al inicio del carnaval, mediante diligencia de allanamiento y visitas de control aduanero a establecimientos abiertos al público, se logró la aprehensión de 313 botellas de licor de reconocidas marcas, las cuales presentaban inconsistencias en el sello y estampillas.
Además, se evidenció que el contenido de las botellas tenía partículas extrañas, y, de acuerdo con el concepto emitido por los peritos, estas bebidas alcohólicas no eran aptas para el consumo humano.
En los procedimientos, fue capturada una persona, quien deberá responder por el delito de corrupción de alimentos, productos médicos o material profiláctico.
La Fiscal y Aduanera, invitó a los consumidores y comerciantes para que aprendan a identificar el licor legal, verificando que este no tenga sedimentos, cerciorarse que la estampilla no esté rota o en mal estado, y que no presente inconsistencias en su impresión, y que las pestañas de los empaques no tengan residuos de pegamento.
Y comprar el licor en sitios de confianza.