En medio de las actividades de patrullaje y control marítimo en la isla de San Andrés, la Armada de Colombia, a través del Comando Específico, de manera conjunta con la Fuerza Aérea Colombiana, detectó dos embarcaciones sospechosas que navegaban a alta velocidad en el suroeste de la isla de San Andrés, y que al parecer se dirigían a Centroamérica.
De inmediato, la Estación de Guardacostas desplegó dos Unidades de Reacción Rápida, las cuales se dirigieron hacia el lugar de la detección, y realizaron el procedimiento de interdicción marítima.
Durante la inspección de las motonaves inmovilizadas, se encontraron 32 personas de diferentes nacionalidades: 16 venezolanos, tres de ellos menores de edad, cinco de la India, cuatro colombianos entre ellos un menor de edad, dos Haitianos, un Cubano, un Ecuatoriano, un Nepalí y un Jordano.
Luego de verificar el estado de salud del personal, las embarcaciones y los migrantes fueron conducidos al muelle de la Estación de Guardacostas de San Andrés, en donde fueron puestos a disposición de las autoridades migratorias y, para el caso de los menores, a disposición del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar – ICBF.
Los cuatro tripulantes de las dos embarcaciones, todos nicaragüenses, fueron capturados por el delito de tráfico de migrantes.