En un rincón del país, un proyecto está transformando el concepto de infraestructura y empoderamiento social, y su impacto ya está resonando en todo el mundo gracias a las redes sociales. Colibre, una iniciativa innovadora, está redefiniendo cómo las comunidades rurales construyen su futuro, literalmente, al demostrar que el Estado no es indispensable para la creación de infraestructura básica.
El modelo es simple, pero revolucionario: Colibre gestiona materiales como cemento, grava, arena y maquinaria mediante alianzas con comerciantes locales, mientras la comunidad aporta la mano de obra. En videos publicados desde las cuentas de Instagram @colibreorg y @joelyepes, se observa cómo una comunidad unida logra arreglar una cuadra completa sin la presencia de ningún miembro de la administración pública. Solo la sociedad civil, con determinación y trabajo colectivo, demuestra que es posible construir carreteras.
El contenido se ha vuelto viral, acumulando miles de visualizaciones y comentarios que celebran el espíritu de autonomía y colaboración que Colibre representa. Las imágenes muestran a hombres y mujeres trabajando juntos, orgullosos de su esfuerzo y del impacto directo que su trabajo tiene en la mejora de sus condiciones de vida.
«Esto no es caridad ni política, es autonomía», explican los creadores del proyecto. «Queremos que las personas entiendan que no necesitan esperar a que alguien más resuelva sus problemas. Tienen el poder de transformar su entorno por sí mismas».
Este proyecto no solo está construyendo carreteras, sino una nueva mentalidad. Al evitar intermediarios gubernamentales, se eliminan los sobrecostos, mientras se fomenta un verdadero sentido de pertenencia.
Colibre está marcando un antes y un después en la forma en que las comunidades abordan sus necesidades. Con cada video y publicación, no solo inspira a otros a replicar el modelo, sino que también desafía la narrativa de que el progreso solo puede venir desde arriba.
En una época donde la dependencia estatal es la norma, Colibre se erige como un ejemplo poderoso de lo que las comunidades pueden lograr con autonomía, solidaridad y un poco de creatividad.