España vivió este lunes el apagón eléctrico más severo de su historia, dejando a millones de personas sin energía en todo el país. El corte masivo paralizó los servicios ferroviarios, interrumpió el funcionamiento de semáforos, negocios y afectó las conexiones a internet en amplias zonas del territorio nacional.
A medida que avanzaban las horas, el suministro comenzó a restablecerse progresivamente, logrando recuperar cerca del 90 % del servicio durante la madrugada del martes.
La falta de energía obligó a suspender totalmente los trayectos ferroviarios, dejando a numerosos pasajeros atrapados dentro de los trenes mientras se organizaban las labores de evacuación. Para atender a las personas varadas, las autoridades habilitaron decenas de estaciones de tren y recintos deportivos como alojamientos temporales durante la noche.