La política de deportaciones masivas de Donald Trump ha impactado en el fútbol en Estados Unidos, obligando a cancelar eventos de los hinchas latinos en varias ciudades por el miedo entre la comunidad migrante y cuando falta un año para la celebración de la Copa Mundial de la FIFA 2026.
Además, los aficionados señalan: «no parece prudente celebrar, animar y festejar mientras tantas familias dentro de nuestra comunidad están siendo separadas y destruidas».
Los operativos migratorios que se llevan a cabo todos los días en diversas localidades del país no solo han provocado zozobra entre los fanáticos de la Major League Soccer (MLS), la liga de fútbol de Estados Unidos, sino también entre los aficionados de selecciones nacionales como la mexicana, que tiene planeado jugar este fin de semana en Los Ángeles -el epicentro de las protestas contra las redadas- en el partido inaugural de la Copa Oro.
A diferencia de otros años, el ‘Tri’ no tuvo el tradicional recibimiento de sus hinchas a su llegada a una ciudad que en estos días está militarizada y el partido del sábado ante República Dominicana en el SoFi Stadium podría suspenderse por el clima de tensión que se vive tras varios días de manifestaciones.
Cortesía: EFE