En Barranquilla, la brisa caribeña ya no solo lleva el aroma del mar y la cumbia, sino también el perfume de las páginas viejas y las historias nuevas. La bicicleta, antes un simple vehículo, ha sido transformada en la nueva embajadora cultural de la ciudad.
Gracias a la Red de Bibliotecas y la visión de la Alcaldía de Barranquilla a través de su Secretaría de Cultura y Patrimonio, el concepto de biblioteca ha experimentado una verdadera metamorfosis. Ya no se trata únicamente de un edificio con estantes y silencio: ahora es un espacio vivo, itinerante, que palpita en los barrios y conecta a la comunidad con el arte, la palabra y la memoria.
En el corazón de esta transformación nace la ‘Biciteca Móvil’, un proyecto ambicioso y humano que lleva la lectura sobre ruedas. Este sistema de bicicletas adaptadas —tres en total— funcionará como módulos literarios móviles, capaces de llegar hasta las personas con movilidad reducida, discapacidad o limitaciones para desplazarse a las sedes bibliotecarias.
“Nuestras bibliotecas tienen módulos en donde nos desplazamos a distintos rincones de la ciudad a llevar nuestra oferta literaria. Hoy tenemos una gran apuesta para que con estas tres bicicletas móviles estemos llevándole nuestra oferta literaria a las personas que tienen problemas de movilidad y no pueden llegar a nuestras sedes”, explicó Juan Carlos Ospino, secretario de Cultura y Patrimonio del Distrito.
Esta estrategia, que se activará tras la culminación de la FILBAC 2025, busca eliminar las barreras físicas y sociales para garantizar que el mundo de los libros y la cultura sea verdaderamente inclusivo. Además de llegar a hogares y comunidades con personas en condición de discapacidad, la Biciteca Móvil también recorrerá espacios de alta concurrencia como el Gran Malecón y los parques distritales, acercando la lectura a adultos mayores y familias.
“La Biciteca Móvil se consolida como un instrumento vital donde, desde la visión artística de la Escuela Distrital de Arte (EDA) y las Casas Distritales de Cultura, no hay límite ni barrera para acceder al mundo de la literatura”, agregó Ospino.
Bibliotecas que trascienden los muros
Barranquilla se consolida como ejemplo nacional e internacional al transformar el papel de las bibliotecas públicas en centros culturales abiertos y dinámicos. Ejemplo de ello son la Biblioteca Cepeda Samudio, en el parque Almendra, que integra la lectura con la concha acústica y la vida al aire libre, y la Biblioteca Étnica Pa To Ma Suto, en el barrio Nueva Colombia, un espacio que recoge los saberes ancestrales de la comunidad afrodescendiente y fortalece la identidad cultural del territorio.
“La Red de Bibliotecas de Barranquilla invita a la ciudadanía y a los medios de comunicación a apoyar y divulgar esta iniciativa que no solo lleva libros, sino también vivencias y experiencias para la formación integral y holística del ser humano”, concluyó el secretario de Cultura.
Con proyectos como la Biciteca Móvil, Barranquilla demuestra que la cultura puede rodar, tocar puertas y transformar vidas, llevando historias, sueños y conocimiento hasta el último rincón de la ciudad.


