La Dirección General Marítima, a través de su Capitanía de Puerto de Barranquilla, de acuerdo con los análisis realizados por el Comité de Seguridad Náutica para el Río Grande de la Magdalena, y luego de analizar los planos batimétricos del canal de acceso, de fecha 17 de julio 2017, determinó que las condiciones siguen cambiantes y se autoriza un calado de 8,5 metros sin restricción para buques con esloras inferiores a 150 metros y 8,3 metros con restricción buques con esloras superiores a 150 metros.
Según se indicó, esta medida determinada por el Comité se debe al alto transporte de sedimentos ocasionado por las lluvias en el interior del país, lo cual obliga a la realización permanente de monitoreo batimétrico y de las condiciones meteomarinas que permite contar con información detallada para la toma de decisiones.
Este calado estará vigente hasta una próxima actualización y corresponden a la evaluación de las condiciones del día de análisis, pero pueden surgir modificaciones por causa de fuerza mayor, por lo que se recomienda al Gremio Marítimo tomar las medidas pertinentes de seguridad.
Advierte la Dimar que este calado será modificado por un nuevo boletín oficial de la Capitanía de Puerto de Barranquilla, una vez se cuente con nuevo plano batimétrico y sea analizado por el Comité de Seguridad Náutica.
El Comité es conformado por la Capitanía de Puerto de Barranquilla, la Corporación Autónoma Regional del Río Grande de la Magdalena (Cormagdalena), Empresas de Practicaje, la Señalización Marítima, miembros de Asociación de Puertos del Atlántico (Asoportuaria) y la oficina de asuntos portuarios del Distrito de Barranquilla.
«La Dirección General Marítima continúa trabajando mancomunadamente con los diferentes gremios marítimos y portuarios, contribuyendo así, a mantener los mejores indicadores de seguridad integral marítima y fluvial en los puertos del país», puntualiza el comunicado.