Una mujer identificada como Dalila María Duarte Martínez, de 49 años, se entregó ante las autoridades que la sindican de haber alojado en su casa del barrio El Ferry, a los presuntos autores materiales del atentado terrorista a la estación de Policía del barrio San José, que dejó seis agentes muertos y 47 policías y un civil heridos.
Según las investigaciones, en su vivienda se hospedaron desde el mes de diciembre pasado, Jefferson Torres Mina, uno de los presuntos autores del atentado, y desde el 13 de enero, Cristian Camilo Bellón Galindo, quien llegó procedente de Cúcuta.
La Fiscalía expidió una orden de captura contra la mujer y ordenó el allanamiento y registro a su casa, la cual fue hallada desocupada
Los investigadores encontraron en el lugar, elementos para la fabricación de los artefactos explosivos utilizados para los atentados terroristas, y por la cantidad de evidencia que se hallaron, se deduce que pensaban fabricar muchas más cargas explosivas.
El inmueble en mención había sido arrendado por la mujer y por su esposo, identificado como Nilson Vargas Mier, de quien se presume fue la persona que acompañó a Jefferson Torres Mena a comprar la motocicleta que este usó para huir del lugar del atentado. Contra él se expidió otra orden de captura.
Avances. Acerca de las investigaciones que se adelantan para hallar a la totalidad de los responsables del Atentado a la Estación San José, el general Mariano Botero, comandante de la policía metropolitana, informó que gracias a la colaboración de la comunidad y a la alta tecnología que se implementa, se expidieron las dos nuevas órdenes de captura.
Una de ellas corresponde al retrato hablado recientemente divulgado, cuya identidad ya fue establecida; y la de su esposa, quien se entregó a las autoridades.
El explosivo utilizado para el atentado es trinitotolueno o TNT, una especie de arcilla explosiva a la que se le agregó metralla para hacer más devastadoras las consecuencias, indicó Botero, quien señaló que en este tipo de atentados, el protocolo establece una investigación penal, otra disciplinaria y una administrativa, para darle completa claridad a lo ocurrido.