Tom Brady, a sus 43 años, logró su séptima Super Bowl, en diez participaciones, y algo todavía más importante, ratificó su puesto de honor como el mejor en el olimpo del fútbol americano. Nadie como él, nadie iguala su récord. Todos le reconocen como el más grande de todos los tiempos. En esta nueva edición volvió a ser la estrella del partido. Lo eligieron mejor jugador (MVP), la quinta vez que recibe este reconocimiento en su trayectoria.
El quaterback de los Bucs, en su primera temporada con los de Tampa tras dos décadas con los Patriots de Nueva Inglaterra, demostró que mantiene viva su magia a pesar de ser el jugador de más edad en la liga NFL. Toda una lección para las nuevas generaciones. Se llevó el primer anillo en 2002. Hace dos años consiguió el último hasta esta nueva edición.
Brady se siente feliz consigo mismo. Dice que espera continuar jugando al menos hasta los 45 (cumple 44 este próximo agosto), lo que significa un mínimo de dos temporadas más. «Volveré», aseguró al recoger el premio como MVP. A diferencia de él, Mahomes dispone de más tiempo y de un talento prodigioso. Pero esta noche del domingo 7 de febrero de 2021, en el estadio Raymond James de Tampa, Brady demostró que es mucho Brady, todavía.
Por fortuna para los Bucs, este es el primer equipo que dispuso de la oportunidad de jugar en su propia casa la final de la Super Bowl. A pesar de la limitación de espectadores por la pandemia, hicieron bueno el factor campo y arrasaron para volver a la senda victoriosa. Se hicieron con la Super Bowl en 2002 y desde entonces su recorrido ha sido un fracaso tras otro. Hasta que apareció Brady.
El juego tuvo que ser suspendido momentáneamente. Un aficionado saltó sobre el césped del Raymond James Stadium, con un bañador fucsia y sin mascarilla, y empezó a correr yardas como si tratara de alcanzar la línea de meta para hacer un touchdown.
Al ver la aparición del espontáneo, la realización cortó rápidamente la imagen, pero muchos periodistas y aficionados inmortalizaron el momento a través de sus móviles.
Cortesía de Agencias.
Fotos: NFL.