El partido entre los Houston Rockets y Miami Heat, disputado en el Toyota Center, culminó en escándalo. Lo que había sido un duelo intenso hasta los últimos segundos derivó en una pelea que involucró a jugadores, entrenadores y asistentes, dejando un saldo de siete expulsados. Los Heat se llevaron la victoria por 104-100, pero el incidente final acaparó todas las miradas y amenaza con terminar con duras sanciones disciplinarias por parte de la NBA.
El detonante se dio cuando faltaban 35 segundos para el cierre. En una jugada que ya estaba cargada de tensión, Tyler Herro, figura de los Heat, y el joven Amen Thompson, de los Rockets, chocaron de manera violenta. Thompson empujó a Herro tras un enfrentamiento bajo el aro, lo que provocó que el jugador de Miami cayera al suelo. Inmediatamente, ambos jugadores quedaron cara a cara, y la situación escaló cuando integrantes de ambos equipos, incluidos los bancos de suplentes, ingresaron a la cancha para intervenir.
El caos fue tal que los árbitros necesitaron varios minutos para calmar los ánimos y determinar las sanciones. Finalmente, decidieron expulsar a siete personas, incluidos jugadores y entrenadores. Marc Davis, árbitro principal del partido, brindó detalles sobre las decisiones tomadas al término del encuentro, en una entrevista con The Athletic, el sitio deportivo del diario New York Times.
Sin embargo, la pelea eclipsó lo que podría haber sido un cierre emocionante. Para los Rockets, esta fue su segunda derrota consecutiva, por lo que se alejan de los puestos de playoffs en la Conferencia Oeste, con solo 13 victorias en 56 partidos jugados. Los Heat, por su parte, lograron consolidarse en la zona de clasificación con 31 victorias en la misma cantidad de encuentros disputados.
Este episodio llega en un contexto de creciente tensión en la NBA, que en los últimos días ya había registrado otro incidente violento. Apenas dos días antes, una pelea entre los Phoenix Suns y los Dallas Mavericks también terminó con varias expulsiones, lo que alertó a las autoridades por esta preocupante tendencia violenta.
