En rueda de prensa, la Fiscalía General de la Nación y medicina Legal confirmaron este miércoles que la necropsia realizada al cuerpo del teniente Coronel Óscar Dávila reveló que su muerte, el pasado 9 de junio, se trató de un suicidio.
La Vicefiscal General de la Nación, Martha Mancera, reveló el marco de los hechos, en la localidad de Teusaquillo, en Bogotá.
Después, narró los últimos minutos del alto oficial antes de su muerte. Estuvo en un apartamento de un familiar, salió de este, luego llamó a su esposa y posteriormente a una periodista de la revista Cambio, antes de llegar al lugar donde se produjo su deceso.
La Vicefiscal confirmó que se trató de un suicidio, pues no hallaron ningún tercero que pudiera golpear, infligir o dispararle al coronel.
Jorge Paredes, médico forense, explicó que el arma estaba puesta a contacto en la cabeza del coronel, que generan una herida que es el signo de Benassi, residuos de pólvora en la parte externa del cráneo y en los tejidos blandos del cuero cabelludo.
«Eso sin lugar a dudas es una herida a contacto», puntualizó.
«Este cuerpo no tenía signos de lucha, riña o indefensión», agregó.
Le llamó la atención que el coronel Dávila estaba tomando un medicamento, producto de su estrés.
Paredes confirmó que pudieron determinar que este caso tiene «características físicas de un suicidio».