Sorprendidos por la noticia del proyecto de decreto del Ministerio de Hacienda que pretende gravar con una retención en la fuente del 1,5 por mil las transacciones realizadas a través del sistema Bre-b y las billeteras digitales, se mostraron representantes del sector bancario, quienes consideran que es una pésima señal del Gobierno ir en contra de la filosofía con la que el Banco de la República creó el nuevo sistema de pagos, que apenas completa un mes de funcionamiento.
Así lo manifestó César Prado, presidente del Banco de Bogotá, durante un panel en el congreso de Camacol en Barranquilla, al señalar que Bre-b en Colombia emula el modelo de Brasil, país que en cinco años logró reducir el uso del efectivo del 80 % al 25 %.
Por su parte, César Suárez, presidente de Davivienda, advirtió que el Gobierno no debe optar por “el camino más fácil” en materia de recaudo a través del sistema financiero, como ocurrió con el 4 x 1.000. Agregó que gravar las operaciones de las billeteras digitales iría en contra de los principios sobre los que se construyó el sistema: interoperabilidad, inmediatez y gratuidad.
“Si alguno de esos tres supuestos no está, el sistema deja de ser el sistema”, enfatizó Suárez.
Desde el Ministerio de Hacienda insistieron en que la medida busca equiparar el cobro con los porcentajes que se aplican a las tarjetas débito y crédito, y aclararon que las transacciones que no representen un ingreso para el receptor no estarían sujetas a retención en la fuente.
