El año pasado, de acuerdo con las estadísticas vitales del DANE, nacieron 445.011 niños, 70.538 menos que en 2023, lo que significa una reducción del 13,7 %, el volumen de nacimientos más bajo reportado en la última década.
Los datos del DANE también dejan ver que hay una postergación en la maternidad, pues la edad media de la fecundidad para 2024 fue de 27,1 años (un año más que en 2005) y la edad media al momento de tener el primer hijo se situó en 24,4 años (en 2005 era de 22,7 años).
Por un lado, la frecuencia de nacimientos por 1.000 adolescentes (15 a 19 años) mostró la mayor reducción entre los grupos de edad, al ubicarse en 51,1 %, lo que representa 33,8 nacimientos menos por cada 1.000 mujeres en comparación con 2015.
En cuanto a defunciones en 2024, el DANE reveló que se registraron 273.772 defunciones no fetales, lo que refleja un aumento del 2 % con respecto a 2023. Esto lleva a tener una tasa de mortalidad de 5,2 por cada 1.000 habitantes, superior a los 5,1 de 2023, aunque dentro de los valores normales de la curva.
Por sexo, la mortalidad masculina sigue siendo superior, con una tasa de 5,8 defunciones por cada 1.000 hombres, lo que equivale a 1,2 puntos porcentuales por encima a la de las mujeres con 4,6 defunciones por cada 1.000 mujeres.
La principal causa de muerte fueron las enfermedades isquémicas del corazón (17 %), seguidas por las enfermedades cerebrovasculares (6,2 %), las enfermedades crónicas de las vías respiratorias inferiores (6,1 %) y los homicidios (5,1 %). También destaca que la mortalidad en la primera infancia (0 a 5 años) ha disminuido desde 2023, alcanzando en 2024 una tasa de 1,4 defunciones por cada 1.000 habitantes, frente al promedio de 1,9 en años anteriores.
Y en el grupo de adulto mayor (60 años y más), la tasa bajó de 27,4 en 2015 a 25,4 en el 2024, mientras que en el grupo de adulto maduro (45 a 59 años), pasó de 3,6 a 3,4 en el mismo período.