“El proyecto del corredor de carga Cartagena-Barranquilla hoy se encuentra en riesgo porque si persisten los riesgos de menor recaudo pudiera estar abocado a una liquidación o terminación anticipada del contrato”, afirma Ernesto Carvajal, gerente de la Concesión Autopistas del Caribe.
Explicó el funcionario que toda la estructura financiera del proyecto está sustentada en el recaudo de peajes y en la actualidad no se trabaja en el cierre financiero porque existen tres riesgos de menor recaudo activados: la estación de peaje de Turbaco, el esquema tarifario que no se ha podido implementar y quedó suspendido este año, y la estación de peaje de Arroyo de Piedra.
Por otro lado, el gerente de Autopistas del Caribe, destacó los avances logrados durante la fase pre construcción, en la que se opera y mantiene la unidad funcional 0 que consta de 253 kilómetros en 7 rutas nacionales entre Cartagena y Barranquilla. Sin embargo, anotó que no se está haciendo nada en la ejecución de obras en las unidades funcionales de la 1 a la 9, excepto las otras obligaciones como diseño, licencias y gestión predial.
Asimismo, enfatizó en que este proyecto es más que una casetas de peajes, porque no solo permitirá conectar con vías más cómodas y seguras a Bolívar y Atlántico, sino que también ofrecen múltiples beneficios como crear más de 4 mil empleos directos y 2.700 indirectos, puentes peatonales, servicios gratuitos de ambulancias, grúa, carro taller, entre otros.
