Pasadas las dos de la madrugada se conoció el triunfo del magnate Donald Trump en las elecciones presidenciales de los Estados Unidos. El polémico candidato republicano se impuso en una histórica votación sobre la ex Secretaria de Estado Hillary Clinton.
En su primera intervención tras el triunfo, Trump sorprendió con un discurso conciliador. Advirtió que será el Presidente de todos, incluyendo a quienes no votaron por él. Prometió reconstruir la Nación y superar las divisiones.
En medio de una gran expectativa se cumplió la definición de la elección en Estados Unidos. Donald Trump y Hillary Clinton buscaban suceder en el cargo al presidente Barack Obama a partir de enero de 2017.
El candidato republicano se impuso en Iowa (6), Utah (6), Carolina del Norte (15), Ohio (18), Texas (38), Montana (3), Carolina del Sur (9), Mississippi (6), Misuri (10), Kansas (6), Louisiana (8), Idaho (4), Indiana (11), Nebraska (5), Tennessee (11), Arkansas (6), Alabama (9), Kentucky (8), Dakota del Sur (3), Oklahoma (7), Dakota del Norte (3), Virginia Occidental (5), Wyoming (3) Florida (29), Georgia (16), Pensilvania (20) y Winsconsin (10) alcanzando 276 votos del Colegio Electoral.
Clinton, en tanto, se impuso en Nevada (6), Distrito de Columbia (3), Massachusetts (11), Vermont (3), Maryland (10), Hawaii (4), California (55), Nueva York (29), Illinois (20), Connecticut (7), Rhode Island (4), Nueva Jersey (14), Delaware (3), Oregon (7), Nuevo México (5), Colorado (9), Virginia (13), Washington (12) obteniendo así 215 votos del Colegio Electoral.
Los aspirantes necesitaban sumar al menos 270 votos del Colegio Electoral para ganar la elección.
Clinton prometía continuar y mejorar las políticas de Barack Obama.Trump prometía hacer todo distinto de cómo lo viene haciendo el establishment político, aunque no haya quedado demasiado claro qué hará ni cómo.
Más que una disputa de propuestas fue una campaña plagada de fuego cruzado fuerte y acusaciones de todo tipo entre dos candidatos con inéditos índices de impopularidad.
Para Clinton, sus años de experiencia política fueron su gran activo y su mayor mochila al mismo tiempo. Debió convivir con la investigación del FBI sobre el uso de su cuenta de correo electrónico privada para asuntos oficiales mientras fue secretaria de Estado y las sospechas sobre los privilegios que habría otorgado a los donantes de la Fundación Clinton.
Sobre Trump, un outsider que rompe con los cánones usuales de corrección política del establishment estadounidense, pesan señalamientos de todo tipo que se ha sabido ganar a lo largo del tiempo y ratificar durante la campaña: intolerancia, misoginia, xenofobia y evasión impositiva son algunos de ellos. Aún así, ha sabido seducir a una amplia porción del electorado defraudada con la clase política de Washington.
Con información de Infobae.