El presidente de Brasil ha visitado esta semana la mayoría de los 64 municipios declarados en emergencia por las fuertes lluvias.
Las precipitaciones se intensificaron a partir del mes de marzo, y han dejado hasta el momento al menos seis muertos.
Según Luiz Inácio Lula da Silva, más de 35.000 familias han resultado damnificadas por las inundaciones. De ellas, casi 8.000 quedaron sin hogar.
Actualidad RT