El analista político Gabriel Orozco calificó como una retaliación ideológica la decisión del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, de imponer un arancel del 50% a todas las importaciones provenientes de Brasil.
Según Orozco, esta medida no responde a razones técnicas o económicas, sino a un trasfondo político, motivado por la postura de izquierda del actual gobierno brasileño y el protagonismo de Brasil en la reciente cumbre del bloque BRICS.
“Trump está enviando un mensaje claro: quien no se alinee con Estados Unidos enfrentará consecuencias comerciales. Se trata de una acción para preservar la hegemonía estadounidense”, aseguró el analista.
Por su parte, el analista económico Joseph Daccarett advirtió que Trump se equivoca nuevamente con esta decisión, ya que termina afectando más a Estados Unidos que a Brasil.
“Con estos aranceles, Estados Unidos ejerce una presión de orden ideológico y político, pero al final quien pierde más es el propio mercado norteamericano”, indicó Daccarett.
El experto aclaró que Brasil apenas destina el 11% de sus exportaciones a Estados Unidos, lo que minimiza el impacto económico de la sanción para el país suramericano.
No se trata solo de una medida comercial, sino de un mensaje geopolítico en medio del ascenso de potencias como China, India o Brasil que cuestionan la hegemonía norteamericana.