El pasado sábado, a la misma hora en que ocurrió el atentado contra la estación de policía del barrio San José el 27 de enero, se llevó a cabo un minuto de silencio y una misa como homenaje póstumo a los cinco policías que hasta ese momento habían muerto en el atentado terrorista perpetrado por el ELN.
Fueron escenas conmovedoras por parte de los familiares de estos héroes de la patria y de sus compañeros de institución y amigos, quienes lloraron esta lamentable pérdida.
Un total de 3,5 kilos de explosivos en dos mochilas, acabaron con la vida de los uniformados y 48 resultaron heridos, entre ellos una civil, además de dos perros que también resultaron víctimas de la metralla que contenía los explosivos.
El patrullero Yorlis Pino Salas, quien sobrevivió al atentado, sostuvo que a pesar de lo sucedido, todos los patrulleros sobrevivientes desean continuar sirviéndole a la patria y le dio un mensaje de fortaleza a los familiares de los policías caídos.
