Gracias a los reportes de los clientes a la oficina telefónica 115, personal técnico de Air-e realizó una inspección en un hospedaje, en donde también funciona un parqueadero, en donde detectó que estaba conectado de manera ilegal a las redes de la compañía.
La conexión antitécnica se hizo desde el poste hasta el predio aprovechando unos árboles frondosos para mimetizar los cables y evitar que fueran detectados.
Con base a una evaluación inicial, este establecimiento tiene un consumo de alrededor de 5 millones de peso al mes.
Por otra parte, técnicos de la compañía detectaron la manipulación de equipos de medida para evitar el pago del consumo real del servicio de energía.
Un caso inicial se presentó en una importante panadería en el barrio El Recreo ubicada en inmediaciones de la carrera 38 con la calle 61 en Barranquilla. El otro caso se reportó en una estación de venta de combustibles en la vía que de Sabanalarga conduce a Luruaco.