Un nuevo caso de sicariato ocurrió a pleno mediodía y a pocas cuadras del CAD de la Policía Metropolitana de Barranquilla. Un prestamista, identificado como Miguel Ángel Osío Olmos, fue ultimado a quemarropa por un sicario que lo sorprendió dentro de una camioneta.
La víctima mortal fue recogido por un médico a pocas cuadras de la carrera 39 con calle 73, donde fueron interceptados por los sicarios. En esa dirección los sujetos encañonaron al médico para obligarlo a frenar, el pistolero se bajó de la moto y de inmediato se acercó hasta la ventanilla del copiloto y le disparó con un arma con silenciador al prestamista.
El médico, que conducía su camioneta, se bajó y corrió hasta una tienda donde se refugió, cuenta un testigo del atentado.
La víctima alcanzó a bajarse de la camioneta Toyota, pero cayó en medio de la carrera 39 y allí fue rematado por el sicario.
Las primeras versiones indican es que el prestamista Osío Olmos iba a cerrar un negocio con el médico, pero los sicarios lo estaban esperando en esa dirección.
El coronel José Palomino, comandante operativo de la Policía de Barranquilla, descartó el robo y confirmó que fue un atentado directo contra el comerciante.
El médico, que no fue identificado, resultó ileso.
Los sicarios huyeron hacia el norte y, según el oficial, ya hay pistas certeras de los sujetos.