«El municipio de Barrancas y todo el departamento de La Guajira está de luto por la muerte de Karla Solano, una niña de 21 años con muchos sueños por cumplir», expresó el exconcejal de Barranquilla, Miller soto, primo hermano de una de la víctimas del accidente que ocurrió la noche del miércoles en la carretera que comunica a Riohacha con el municipio de Albania.
Soto dijo que Karla era una excelente persona, muy buena estudiante y una ejemplar hija que periódicamente visitaba a sus padres desde Barranquilla, donde cursaba décimo semestre de Medicina en la Universidad del Norte.
Sobre las causas del accidente, Soto cuestionó la falta de control a los camiones que transportan gasolina de contrabando desde Venezuela; y aspira que los anuncios hechos por el gobernador de La Guajira, a raíz de este fatal accidente, se cumplan y no queden en meros discursos coyunturales.
Mediante un acróstico dedicado a Karla, Soto expresa su dolor y les envía a sus tíos, padres de la joven, un mensaje de aliento aunque sabe que «no hay palabras, ni habrá un gesto que les calme o que les señale el camino que les serenará sus almas».