Conductores de la empresa de transporte público Cootrántico, a la que pertenece la ruta de buses Lucero San Felipe, en la que este fin de semana una niña de tres años fue asesinada a balazos en medio de un atraco, revelan un preocupante aumento de casos de hurto.
El jefe operativo, Álvaro Gentil, informó que en 2018 fueron víctimas de 155 atracos mientras que solo en los 86 días de 2019 ya se reportan 52.
“Es una situación muy grave, los conductores y pasajeros muchas veces terminan lesionados por los delincuentes”, advirtió Gentil, quién contó además que ante la ola de inseguridad en el gremios los 170 choferes amenazaron con irse a paro de actividades.
Las zonas de la ciudad donde más se han registrado estos hechos corresponden a barrios del suroccidente como El Bosque y Sourdis.
