Las autoridades de policía impusieron un comparendo a la familia que durante la mañana de este lunes festivo alteró el orden público con un megáfono, desde la azotea del edificio Eternity, en el norte de la ciudad.
Los protagonistas del bochornoso espectáculo al parecer incumplieron una norma implementada por las autoridades ante la prolongación del Coronavirus Covid-19, ya que estaban departiendo en una zona común de la edificación desde el pasado domingo en la noche hasta la mañana del lunes festivo.
El comparendo de 800 mil pesos se le impuso a una mujer adulta que estaba acompañando a varios jóvenes durante la celebración irrespetuosa que tenían.