Fuertes disturbios se registraron durante varias horas en la calle 72, en inmediaciones del estadio Romelio Martínez donde la Fuerza Pública y un numeroso grupo de jóvenes protagonizaron una verdadera batalla campal.
En el lugar, desde tempranas horas se adelantaba un plantón convocado en redes sociales, para rechazar la realización, en medio del Paro Nacional que se vive en Colombia, del partido por Copa Libertadores entre el Junior de Barranquilla y el River Plate de Argentina.
Cuando se aproximaba, la hora cero para el inicio del partido, los miembros de la Fuerza Pública recibieron la orden de contener el avance de los manifestantes, que ya habían logrado superar un primer anillo de seguridad.
En su intención de despejar la vía, los uniformados comenzaron a lanzar gases lacrimógenos a los jóvenes que a su vez se armaron de piedras y otros objetos contundentes para enfrentarse a los policías de vigilancia y del escuadrón móvil antidisturbios.
En el hecho se reportan al menos 12 jóvenes heridos, quienes fueron trasladados a diferentes centros asistenciales de la ciudad.
Finalmente, las autorizados garantizaron la realización del encuentro futbolístico internacional, pese a la situación registrada en los alrededores del escenario deportivo.