Glenny Barranco, administradora del Edificio La Ría, donde fue agredida la Médico Pediatra Dalila Peñaranda, aclaró que es responsabilidad del tenedor del apartamento de todas las personas que ingresaron a la fiesta de cumpleaños.
En diálogo con Atlántico en Noticias, afirmó que el grupo de Mariachis ingresó al edificio después de las 11 de la noche, cuando la policía se encontraba en el lugar.
“A pesar de que rigen normas de Propiedad Horizontal, es el propietario y el tenedor del apartamento los que autorizan el ingreso de personas visitantes”, insistió la administradora del Edificio La Ría.
La administración de La Ría divulgó el siguiente Comunicado a la opinión pública:
Ante los lamentables hechos ocurridos en horas de la madrugada del sábado 5 de septiembre en el norte de Barranquilla, en mi calidad de administradora del Edificio La Ría ubicado en la carrera 47#102-170 me permito aclarar lo siguiente.
1. Que la administración y convivencia en una propiedad horizontal, como es el caso de conjuntos y edificios de apartamentos, están sujetas a la Ley 675 de 2001 que regula el ejercicjo de las funciones de los órganos de gobierno, Asamblea General y Consejo de Administración así como los deberes, derechos y obligaciones de los coprorietarios y residentes, quienes son responsables directa y solidariamente en los asuntos que comprometen a la coprooiedad. Las funciones del administrador no pueden ir más allá de los lineamientos establecidos por la ley y los reglamentos, ejerciendo los respectivos llamados de atención y acciones judiciales correspondientes; exceder esas funciones podría ser una violacion a derechos constitucionales tales como a la privacidad y a la propiedad privada, ya que para suplir situaciones urgentes de orden público existe el Código de Policía.
2. En medio de la situación generada por la fiesta en uno de los apartamentos del edificio T1. (apto 1002), han salido a la luz pública videos, noticias y piezas informativas fragmentadas, generando más confusión en la opinión pública, toda vez que las autoridades han omitido su función de prestar apoyo y corregir situaciones expuestas de manera oportuna por parte de la administración del edificio, por lo que lo ocurrido en el caso de la agresión a estas dos indefensas mujeres pudo haberse evitado si la policía hubiese actuado a tiempo, ante los previos requerimientos instados por la administracion del edificio.
3. Solicitamos al señor comandante de la policía que se retracte de lo afirmado en medios masivos de comunicación, al señalar que en este caso hay en la copropiedad supuesta venta de sustancias alucinógenas, por cuánto una declaración de ese tipo viniendo de un alto oficial pone en riesgo el buen nombre y la seguridad del edificio. El vídeo en el que se observa el supuesto consumo de sustancias prohibidas debe ser analizado en su contexto, porque el hecho de que unos residentes o visitantes hayan presuntamente cometido ese tipo de infracción no puede ser motivo para estigmatizar al edificio en general. También resulta absurdo entender la posición de la Policía Nacional y el secretario de gobierno distrital, doctor Clemente Fajardo, al anunciar un comparendo contra la administracion del edificio por la supuesta violación a normas sanitarias. No puede la administración pasar de víctima a victimario por una omisión en la tarea de amparo que debe cumplir la Policía, tampoco puede esta institución eludir y trasladar su competencia y responsabilidad al órgano de administración de la copropiedad, el cual carece de funciones policivas.
4. De manera respetuosa solicito a los medios de comunicación y a los influenciadores de las redes sociales, que en futuras oportunidades midan, verifiquen y revisen sus contenidos ya que con sus publicaciones están afectando el buen nombre de personas que no han hecho más que prestar sus servicios de manera eficiente en el Edificio.
5. Es falso que la señora administradora del Edificio Glenny Barranco Vargas forme parte del grupo que asistio y agredió a la pediatra Dalila Peñaranda y a la señora Carmen Pérez, víctimas de un ataque reprochable, por el contrario fue la administración del edificio la que activó la queja ante las autoridades para que la policía llegara a atender el caso. Lamentablemente no se tuvo en cuenta el protocolo de reacción de las autoridades a la hora de atender un caso de posible alteración de la convivencia.
6. Expreso mi solidaridad con la doctora Peñaranda quien forma parte del Comité de Convivencia del Edificio y la señora Carmen Pérez quienes fueron víctimas de esta reprochable agresión y hago un llamado a la sociedad, para que se revisen las situaciones sin sesgos y teniendo en cuenta en todo momento el cumplimiento de la Ley 675 de 2001, El Código de Policía y la Constitución Política de Colombia. .
Cordialmente
Glenny Barranco Vargas
Administradora
