El comandante del Cuerpo de Bomberos del Distrito, el capitán Jaime Pérez, solicitó a los alcaldes y a la Policía Departamental ejercer control a la venta de gasolina en casas de familia en los municipios, por el alto riesgo que representan este tipo de actividades sin las más mínimas medidas de seguridad para su manipulación.
Pérez colocó como ejemplo la conflagración que se presentó en el municipio de Sabanalarga la noche del domingo, donde una vivienda de paja se quemó por la explosión de combustible que se expendía allí de manera artesanal.
El comandante de los Bomberos en Barranquilla dijo que esta práctica se repite en muchos municipios del Sur del Atlántico para responder a la gran demanda de combustible que requiere la proliferación de motocicletas en estas poblaciones.