El diputado Adalberto Llinás afirmó que desde hace tiempo el CARI está cerrado para la atención y servicios de alta complejidad.
“No tenemos ni claridad para salvar la parte mental del CARI, el más perjudicado es el usuario”, expresó Llinás.
El diputado manifestó que el hospital CARI no cuenta con patrimonio para afrontar sus deudas y su cierre es inminente.
Por su parte, el empresario del sector salud Iván Reátiga se mostró de acuerdo en fortalecer el CARI Mental ante la imposibilidad de que continúe con los servicios de alta complejidad.
“El actual CARI es una papa caliente y los más afectados son los usuarios que no reciben atención en salud”, manifestó Reátiga.
Recordó que en la Gobernación de Carlos Rodado su grupo Campbell prestó el servicio de ortopedia en el CARI, pero cuando llegó el mandatario Eduardo Verano se retiraron porque presentían impases.
