Un llamado de atención al alcalde de Piojó y a la gobernación del Atlántico hicieron los habitantes del corregimiento de Hibacharo para que se mejore las condiciones del cementerio.
Denunciaron que algunas bóvedas sufren inundaciones por desbordamiento de los arroyos, y la situación se agrava teniendo en cuenta que las lluvias van a seguir por los próximos días.
“Esto no es de ahora, este problema lo tenemos desde hace algunos años, y ni la alcaldía, ni la gobernación han hecho nada para mejorar el campo santo”, señaló uno de los residentes en esta población.