Habitantes de Polonuevo marcharon recientemente por las calles de esta población hasta llegar a la Alcaldía para protestar por los fuertes olores que produce un criadero de cerdos, el cual ya había sido cerrado por las autoridades ambientales, pero que de manera sorpresiva lleva varios meses funcionando nuevamente.
El líder social de ese municipio, Álvaro Goenaga reiteró que como consecuencia de esta contaminación, ya se presentan enfermedades respiratorias, especialmente entre los niños.
“El llamado es a las autoridades ambientales del departamento y al Alcalde para que no permitan que la población siga afectada por esta porqueriza”, dijo el representante de la comunidad.