Durante el encuentro de 18 gobernadores con el Presidente de la República, Gustavo Petro, el gobernador electo del Atlántico, Eduardo Verano De la Rosa presentó al Jefe de Estado a través de una carta una propuesta de cinco puntos para proyectar un trabajo que lleve al Atlántico a un nivel superior.
Son cinco prioridades en las que se debe trabajar de manera conjunta, explicó Verano De la Rosa, quien invitó al Presidente a sumar esfuerzos en beneficio de los ciudadanos de esta zona del país.
Verano, participó en el encuentro con el presidente de la República, Gustavo Petro, en la Casa de Nariño, con el propósito de intercambiar ideas y entregarle la carta en la que resume los puntos clave para desarrollar estratégicamente, las necesidades más apremiantes del departamento.
En la misiva, Verano invita al mandatario de los colombianos a trabajar de manera conjunta por el bien de los ciudadanos. “Tengo el agrado de dirigirme a usted para expresarle mi más sincero deseo de coordinación y colaboración estrecha con el Gobierno nacional que usted lidera y con las propuestas de cambio profundo que requiere nuestro país para lograr la transformación que nos lleve a ser una potencia de la vida, como se expresa en el plan nacional de desarrollo”.
Los cinco puntos que propone el gobernador electo de los atlanticenses son: apoyo a los Juegos Panamericanos Barranquilla 2027 para ratificar el compromiso con la vida a través del deporte; liderazgo en hidrógeno verde para convertir al Atlántico en el departamento líder en transición energética; más vías para generar mayor conectividad en la región Caribe con obras como el puente de La Hermandad que beneficiarían a Atlántico y Magdalena; reforma a la salud con la infraestructura adecuada y, por último, seguridad humana y sociedad del conocimiento porque se tiene prevista una inversión, sin precedentes, en ciencia, tecnología e innovación para dar un verdadero salto económico.
Verano reiteró su compromiso de entablar puentes de entendimiento con el Gobierno nacional y dejar de lado diferencias políticas que no permiten que se trabaje en beneficio de lo esencial: la gente.