Hoy martes 7 de abril, día del cumpleaños de Barranquilla, en Atlántico en Noticias destacamos en esta celebración de los 207 años de La Arenosa, cómo los hijos paridos en la Puerta de Oro de Colombia, a pesar de la crisis, mantenemos ese espíritu alegre. Y con buena actitud y bacanería le ponemos la cara a la cuarentena.
«Yo me levanto temprano y pongo mi musiquita currambera y la vacilo aquí. Después voy a la cocina a ver si encuentro guineo cocío, desayuno con suerito y queso. Si no hay más nada me reposo bajo el palo e mango y después pongo el abanico pa’ ver televisión. Así como es la Costa, nuestra Curramba. Escucho música salsa del Joe Arroyo y vallenato del más corronchito y bacano ara recordar los tiempos viejos», comentó César Fonseca.
Su majestad el guineo verde ya se ha convertido en el alimento infaltable en las cocinas barranquilleros al punto que hasta la mamadera de gallo ha dado para querer declararlo fruta nacional por haberle salvado la patria a más de uno…
«Aquí pasándola comiendo guineo verde y hay que aprovechar porque está barato. Ya lo he comido en patacones, frito, guisado, machacado con queso, machacado con suero. Mejor dicho, ¡puro guineo!», añadió entre risas Federico Salcedo, habitante del barrio La Paz.
Y como en los mercados tampoco ha faltado la harina, las más de casa sí que saben sacarle el jugo a este alimento en todas sus presentaciones.
«He mamao empanada, bollo, arepa e’ dulce, arepa e’ queso, arepa e’ anís, arepa e’ cebolla… ya no sé qué más hacer con la masa pero bueno… todas esas son bendiciones para pasar la cuarentena», añadió Nayibe Rodríguez.
Aunque como dice la canción del Joe Arroyo, el barranquillero camina y baila arrebatao, el estar encerrado en casa, no le quita su tumbao y por eso más de una pareja se ha ido de motilada ¡así sea que queden trasquilaos!
«Yo estaba malgeniada de ver qué mi marido tenía ese pelo de todos colores porque él se lo pinta con pastillitas de mil pesos. Así que le pregunté cómo lo motilan en la barbería y lo hice cogiendo la peinilla y le fui cortando», comentó jocosamente al calificar el pelo de su esposo como «chaqui chaqui».
Lo que sí está claro es que en temas de convivencia aquí y en la conchinchina tal como dice el refrán en esas peleas de marido y mujé, nadie se debe meter…
«Menos mal que no puedo salir a la calle porque ¡nojoda con ese corte que me hizo! Parezco un guineo comido de cotorro», señaló la víctima de esta peluquera improvisada.
Sí señor, pero quédate en casa. El barranquillero bacán, chévere, que a su ciudad y quiere que toda curramba sea ejemplo de responsabilidad, es creativo y se rebusca así sea pa’ ponerse a pintar el patio y darle la vuelta a la casa.
«Estoy de turismo de la sala al cuarto y del cuarto a la sala y ahí me regreso. Algo me invento voy a ver si le pinto así sea las canas al perro», puntualizó Jhasbell Núñez quien tiene claro que a pesar de estar en aislamiento lo más importante es prevenir.
Barranquilla, feliz cumpleaños. Tus hijos se cuidan y te cuidan.