El ministro de Educación Nacional, Daniel Rojas Medellín, hizo un llamado urgente a las autoridades nacionales para atender la grave situación de violencia que se vive en la Universidad del Atlántico, tras los disturbios y enfrentamientos registrados luego de la designación del rector Leyton Barrios.
“Ante la inacción de autoridades locales solicito a @mindefensa, @MinInterior, @DefensoriaCol, @PGN_COL, @Gobatlantico, @FiscaliaCol, personería y entidades por determinar la instalación de un Puesto de Mando Unificado (PMU) de orden nacional para atender esta situación, con el debido respeto de la autonomía universitaria, pero con el respeto también de un propósito mayor: respetar la vida”, expresó el ministro en su cuenta de X.
Rojas advirtió sobre denuncias que apuntan a la presunta presencia de personas armadas dentro del campus universitario, lo que ha generado temor entre estudiantes y docentes.
“El paramilitarismo en las universidades públicas ha sido parte de una lamentable historia que hace parte del pasado, y no venimos acá a repetir o permitir la repetición, sino a cambiar (…) videos y testimonios de estudiantes en la Universidad del Atlántico indican que, presuntamente, personas ajenas a la universidad han ingresado armadas a violentar a estudiantes y profesores reunidos en la asamblea multiestamentaria”, manifestó el funcionario.
El jefe de la cartera de Educación aseguró que ha dado instrucciones a la Subdirección de Inspección y Vigilancia para que haga uso de todas las herramientas legales y constitucionales disponibles con el fin de proteger la vida y los derechos de la comunidad universitaria.
“Con la fuerza que nos permita la norma y respetando el debido proceso, en aras de consolidar la democracia universitaria, materializar el derecho a la educación y salvaguardar la integridad de estudiantes y profesores. Desde el momento que instruí la directriz a la fecha, hemos avanzado en una estrategia que será comunicada con la prudencia que requiere la situación”, puntualizó Rojas.
El llamado del ministro se produce en medio del paro estudiantil y docente que mantiene en cese de actividades a la institución, mientras se exige la renuncia del rector Leyton Barrios y se denuncian presuntos actos de intimidación y violencia dentro del alma mater.


