La directora del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar, Karen Abudinen, advirtió que la meta es que ningún niño resulte quemado con pólvora durante esta temporada de Navidad y Fin de Año.
Recordó que durante el 2016, siete menores de edad resultaron quemados durante la manipulación de estos juegos pirotécnicos en el Departamento del Atlántico.
La funcionaria le hizo un llamado a los padres de familia y los adultos en general para que no le compren pólvora a los niños y así evitar hechos que lamentar.
Por su parte, el médico pediatra Libardo Diago reiteró que todo juego elaborado con pólvora es perjudicial para la salud de los niños.
“Las velitas de bengala y los triquitraque son dañinos, este último producto tiene la cantidad de fósforo blanco suficiente para que un adulto de 60 kilos de peso que se lo tome de manera accidental muera en pocos días”, advirtió Diago.
Dijo que tiene conocimiento que en muchos lugares se está vendiendo pólvora como si fueran alimentos por lo que también hizo un llamado a las autoridades.