Desde finales del año 2015, Fonade adjudicó el contrato para la construcción de la tan anunciada planta de tratamiento de aguas residuales de Malambo por $18.000 millones, ante el paso del tiempo y observando que nadie dice nada sobre el particular, nos acercamos a la empresa Aguas de Malambo y conversamos con Walter Moreno, gerente de la empresa, quien confirmó lo dicho.
Moreno señaló que el año anterior se revisaron los diseños por parte del consorcio ganador de la licitación y quienes sin poner una pala en el suelo definieron que los diseños requerían algunas correcciones y que por consiguiente al proyecto la faltaban cinco mil millones de pesos, cosa que después de un tira y afloje entre Aguas de Malambo realizador del proyecto, la Gobernación y el Ministerio de Vivienda, Ciudad y Territorio, acordaron con el consorcio Petar 2017, entregar no cinco sino tres mil millones de pesos más para corrección de diseños, dineros que colocaron Findeter, $1.000 millones, que quedaron de remanentes del proyecto inicial; y $2.000 millones, la Gobernación del departamento, recursos que salieron del Plan Departamental de aguas, para una contratación final de $21 mil millones.
Aunque el consorcio seleccionado ya cuenta desde el año anterior con las licencias y diseños corregidos para dar inicio a las obras, curiosamente es el Ministerio de Vivienda, Ciudad y Territorio, quien ha dilatado el arranque de las mismas, pues la exministra Elsa Noguera anunció para junio del presente año, la colocación de la primera piedra y desafortunadamente eso nunca sucedió y terminó renunciando al ministerio a finales de julio y las obras de la planta de tratamiento de aguas residuales de Malambo aún siguen esperando vía libre por parte del Minvivienda.
Una vez arranquen las obras de construcción de la nueva planta de tratamiento de aguas residuales de Malambo, las mismas deben estar culminadas un año después según el contrato y así dejar de contaminar las Ciénegas de Malambo y Mesolandia, lo cual está en manos del nuevo ministro de Vivienda para su realización.
Es importante señalar que la planta a construir será una planta mixta o sea no será una planta moderna, puesto que el proceso se realizará con lagunas de oxidación (antiguo proceso de descontaminación que ya no se usa) y culminará con unos filtros modernos que depurarán las aguas contaminadas solo hasta un 80 por ciento, para luego verterlas en las Ciénegas de Malambo y por ende de Mesolandia.
El proyecto no incluye la descontaminación de las Ciénegas, cosa que -según lo indagado- le tocará a la CRA o Cormagdalena, cuál de los dos sea competente, cosa que no veremos nunca y estos cuerpos de aguas jamás recuperarán su belleza y biodiversidad.
Tampoco incluye la reubicación de más de 45 familias que invadieron los terrenos adquiridos en su momento para la construcción de dicha planta a orillas de la carretera Oriental y las cuales supuestamente van a ser reubicadas en un proyecto denominado Armonía Social, desarrollado por la Gobernación del Atlántico y el Fondo de Adaptación, pero el cual aún está en pañales.
¿Sera que el actual Ministro de Vivienda y Agua Potable Jaime Pumarejo sí dará viabilidad para que inicien las obras antes de que termine el 2017 o seguirá Aguas de Malambo y las empresas ubicadas en la zona oriental vertiendo las aguas residuales a lo que queda de la Ciénaga Grande de Malambo y Mesolandia?