Cada vez es más común para los 147 mil pasajeros que a diario se movilizan en los vehículos de Transmetro ver la escena de vendedores al interior de las estaciones de Transmetro que ofrecen dulces, cantan o piden ayuda incluso con sus hijos en brazos, a pesar de las restricciones de las autoridades.
Atlántico en Noticias hizo un recorrido desde el Portal de Soledad hasta la estación Joe Arroyo y acompañó en su viaje a los extranjeros quienes a pesar de exponerse a ser enviados a la Unidad de Prevención y Justicia de la Policía y ser sancionados por violar el artículo 146 del Código Nacional de Policía.
Carlos Rojas, un venezolano de 29 años hace 20 días llegó a Barranquilla proveniente del estado de Miranda. Relata mientras ofrece dulces en un articulado que es la única opción que tiene para subsistir ante la crisis del vecino país.
“Pagamos nuestro pasaje, tenemos que lidiar con la Policía o los supervisores. A diario se llevan en promedio a 10 compañeros a la UPJ y ese día de trabajo lo perdemos”, cuenta mientras intenta ocultar la mercancía en bolsas negras y morrales.
Sin embargo, en medio del rebusque la situación cada vez se torna más tensa, solo este martes murió por heridas con cuchillo en el hospital General de Barranquilla un vendedor ambulante identificado como Joaquín Ramón Castillo Obeso, de 29 años, de nacionalidad venezolana, después de sostener una riña en la estación de Transmetro Joaquín Barrios Polo con otro venezolano quien fue capturado.
No obstante son los mismos vendedores quienes aseguran que las autoridades están cometiendo atropellos contra ellos, así lo denunciaron.
“Nos bajan, nos quitan la mercancía y se la comen delante de nosotros y aveces no estamos vendiendo y nos llaman para montarnos en la patrulla sin aire y en el sol”, reveló uno de ellos mientras esperaba su turno para vender galletas y mentas. Otro reveló que hasta los uniformados les piden dinero para dejarlos ir.
¿Pero cuál es el control que ejerce Transmetro en estos casos? Ruby Rubio, subgerente de comunicaciones del sistema de transporte masivo, explica que el tema de las ventas cada vez se ha complicado más así como el número de quejas de usuarios. Sin embargo advierte que son la Policía y la Secretaría de Espacio Público del Distrito los responsables de hacer operativos aun cuando en cada una de las estaciones cuentan con guías.
A su turno Henry Cáceres, secretario de Control Urbano y Espacio Público, revela que en operativos durante este año por ventas dentro del sistema, se aplicaron 61 comparendos de los cuales el 80% de ellos corresponde a personas de nacionalidad venezolana entre los que se cuenta además a 15 menores de edad quienes fueron retirados por estar vendiendo.
A pesar de las denuncias y de la incomodidad son más los pasajeros se meten la mano al bolsillo ante el llamado desesperado del éxodo venezolano.
