El operativo que se realizó para el desalojo de 200 familias venezolanas que se habían ubicado en una de las orejas del puente de la calle Murillo con la Circunvalar, se desarrolló como lo habíamos planificado, indicó el secretario de Control Urbano y Espacio Público, Henry Cáceres.
«Era necesaria esta acción, pues se había colocado en riesgo la sanidad pública, la seguridad y la sana convivencia en ese sector de la ciudad y así lo habían denunciado los habitantes de la zona en inmediaciones del estadio Metropolitano», explicó el funcionario, al concluir el operativo.
«Sabemos de las necesidades de estas familias provenientes del vecino país, pero había que actuar para reestablecer el orden y el espacio público en el sector, por ello procedimos a hacer la limpieza correspondiente y disponer el terreno para la siembra de muchos árboles», concluyó Cáceres.