El ministro de Justicia, Jorge Londoño Ulloa, afirmó este fin de semana en Barranquilla que si bien el problema carcelario es serio en el país, la solución no está en la construcción de recintos penitenciarios.
De esta forma le respondió el alto funcionario a las declaraciones que el alcalde de Barranquilla, Alejandro Char Chaljub, hizo hace unas semanas en el sentido de que el Gobierno se olvidó de hacer cárceles en el Caribe.
Las declaraciones las entregó el ministro en el marco del evento donde reconoció a nombre del Estado Colombiano la responsabilidad en el asesinato del campesino Omar Zúñiga Vásquez y la tortura a su madre, Amira Vásquez de Zúñiga, cometidos en junio de 1992 por militares de la Armada en el municipio de San Jacinto, Bolívar.
El jefe de la cartera de justicia indicó que en los últimos 15 años se han construido alrededor del 136 por ciento más de infraestructura física, pero la población carcelaria ha crecido el 320.
Recalcó que hay que explicarles a los colombianos que la cárcel no es única solución a los conflictos, el derecho penal debe ser la última razón.
