A propósito de los problemas actuales de sedimentación que se presentan en el río Magdalena, que a diario ocupan la agenda informativa de Atlántico en Noticias y los principales medios de comunicación de esta sección del país, el padre Cyrilo Swinne nos hizo llegar una reflexión que escribió en enero de 2017 sobre el tema y que en su momento no fue publicado.
“Sin embargo creo que lamentablemente estas reflexiones no han perdido su actualidad. Tengo que confesar que a veces me siento, no como un profeta, sino como un loco gritando en el desierto”:
La noticia en el Heraldo de hoy, jueves, 12 de enero (2017), me dejó como condorito…….
Me refiero al artículo “Invias estudiara impacto de obras del Pumarejo en el canal de acceso.”
¿Cómo asi? Ahora, cuando ya están casi todos los pilotos para el nuevo puente Pumarejo sembrados en el rio y en la orilla a ambos lados del rio, es que vamos a estudiar su impacto en el canal de acceso? ¿Es que no se hizo este estudio antes de empezar las obras? ¿Es que no se hizo el estudio de todos los efectos de esta obra en un modelo hidráulico, como se hizo cuando se planeó y preparó el efecto de las obras de los diques direccionales? Todavía me recuerdo haber visitado en su tiempo este modelo hidráulico dirigido por la Universidad del Norte y una empresa holandesa?
Yo no sé, porque soy un simple curita en el Sur-Occidente de Barranquilla que a penas sabe rezar un poquito, pero también me pregunto si fueron estudiados los efectos de las otras estructuras que en los últimos años aparecieron en el rio Magdalena.
No soy sabio, pero si he aprendido que hay que escuchar y aprender más de la sabiduría de la gente sencilla pero experimentada, que a nuestros supuestos doctores, letrados y estudiados.
Fue asi que me puso a pensar lo que un ni tan viejo, pero si experimentado navegante de muchos años en los planchones sobre el rio Madalena, me dijo cuando desde el malecón de la avenida del rio me señaló en la mitad del rio las estructuras para cargar y descargar los barcos, con la observación: estas estructuras van a cambiar la corriente del rio y tarde o temprano se va a sedimentar este lado del ahora bellísimo malecón.
Será verdad, que somos tan buenos, hasta campeones de la improvisación, que nuestra única respuesta a todas las observaciones, es: ESTO SE ARREGLA MAS TARDE…