Tras la carta en la que solicitaran al presidente la suspensión de clases y la posterior decisión del primer mandatario de tomar esta medida de carácter excepcional, se conoció un nuevo pronunciamiento del Colectivo Magisterial Acción Ética Docente.
Esta vez los educadores tras agradecer al presidente Iván Duque en nombre de los intereses de los docentes, de los estudiantes, de los padres de familia y de la sociedad en su conjunto advirtieron que «no debe obligarse al personal docente a correr los riesgos que significan movilizarse y congregarse en los espacios escolares durante dos semanas» como lo deja entrever el primer mandatario.
En la misiva los docentes advierten a las autoridades del nivel central, departamental y municipal que existen instrumentos legales para el desarrollo de trabajo no presencial tales como la Ley 1221 de julio 16 de 2008; la Circular 018 del 10 de marzo de 2020 (expedida por Minsalud) y la Directiva Presidencial 02 de marzo 12 de 2020, por lo que de persistirse en el trabajo presencial se estaría colocando en un innecesario riesgo la salud y vida de los docentes y de sus núcleos familiares.
Al respecto los educadores señalaron que de ser necesario emprenderían acciones jurídicas para la protección de sus derechos fundamentales a la salud y a la vida y que la ocurrencia de cualquier percance relacionado con el contagio del coronavirus puede
acarrear «responsabilidades en el plano disciplinario, penal y civil» para quienes den órdenes de concurrir al trabajo a sabiendas de los riesgos que ello implica.
Igualmente los docentes consideran inadecuado que se haya decidido adelantar vacaciones «en el entendido en que a una emergencia nacional no puede otorgársele tal carácter haciendo nugatoria la posibilidad real… de disfrutar de este período bajo el espíritu y en los términos en los que fue concebido por el legislador».
Para los educadores «es aventurado e irresponsable y crea expectativas irreales el pensar… que el país pueda superar la delicada situación que hoy afronta en tiempos en los que ni siquiera países del primer mundo han podido lograrlo». Para los educadores la protección del estado no puede ni debe ser diferenciada.
No hay vidas de primera y vidas de segunda importancia, hay vidas y la vida es sagrada y debe protegerse por igual y sin diferenciaciones de ninguna índole
El texto de la carta y pronunciamiento es el siguiente
Doctor
IVÁN DUQUE MÁRQUEZ
Presidente
República de Colombia
E. S. D.
Atento saludo.
Referencia: Pronunciamiento frente a decisión de suspensión de clases
El Colectivo Magisterial ACCIÓN ÉTICA DOCENTE saluda y recibe con agrado la medida excepcional y de protección a la salud pública adoptada por su despacho en la tarde de este domingo, en el sentido de suspender clases a partir de este lunes 16 de marzo, respuesta que de una forma u otra atiende a posiciones y solicitudes elevadas a través de las redes sociales por los ciudadanos y a la solicitud formal que en el mismo sentido radicáramos en el día de ayer ante Ud. en nombre de los intereses de los docentes, de nuestros estudiantes, de los padres de familia y de la sociedad en su conjunto.
Advertimos no obstante, que en procura de la salud de los educadores, en conexidad con el derecho fundamental a la vida de los mismos, no debe obligarse al personal docente a correr los riesgos que significan movilizarse y congregarse en los espacios escolares durante dos semanas (Marzo 16 – Marzo 27) para la preparación de “planes y metodologías no presenciales de estudio para ser desarrollados por los estudiantes desde sus casas”.
Desde la expedición de la Ley 1221 de julio 16 de 2008 y más aún con la Circular 018 del 10 de marzo de 2020 (expedida por Minsalud) y la Directiva Presidencial 02 de marzo 12 de 2020 existen mecanismos para el desarrollo del trabajo empleando tecnologías de la información y las comunicaciones que bien pueden autorizarse e implementarse en los retos que el presente nos plantea.
Si aún a pesar de lo anterior, se insiste en el trabajo presencial en lugar del virtual, para el caso de los docentes, las autoridades del orden central, departamental y municipal deben dejarlo sentado a través de un acto administrativo, de tal suerte que si se llegare a comprometer la salud y la vida de cualesquiera de los miembros del cuerpo de educadores en el país, como consecuencia de la persistencia en el trabajo presencial de los docentes, se puedan determinar responsabilidades y responsables en el plano disciplinario, penal y civil por parte de quienes sufran afectación siguiendo órdenes de sus superiores.
Diferimos igualmente, y así lo dejamos sentado, que se opte por la fórmula de adelantar vacaciones en los días comprendidos entre el 30 de marzo y el 20 de abril (4 semanas), en el entendido en que a una emergencia nacional no puede otorgársele tal carácter haciendo nugatoria la posibilidad real para el cuerpo docente de disfrutar de este período bajo el espíritu y en los términos en los que fue concebido por el legislador.
Además, consideramos, que es aventurado e irresponsable y crea expectativas irreales el pensar de manera demasiado optimista y apresurada, que el país pueda superar la delicada situación que hoy afronta en tiempos en los que ni siquiera países del primer mundo han podido lograrlo.
Insistimos en nuestra posición y petición para que el Gobierno bajo su dirección avance en el proceso de proveer a las escuelas, y por intermedio de ella a los estudiantes, de herramientas tecnológicas y de conectividad y de plataformas para el desarrollo de la educación virtual que a partir de ahora permitan afrontar la ocurrencia de situaciones similares en el futuro. Además, es importante que se avance en términos de optimización de la infraestructura escolar, posibilitando que cada espacio escolar al que acudan nuestros niños y niñas cuente con la dotación sanitaria adecuada y suficiente y con el presupuesto para la provisión de insumos (como el jabón) fundamentales en la prevención de enfermedades.
Finalmente, advertimos que siempre que las organizaciones sindicales no respondan prevalentemente en la salvaguarda de los intereses y derechos del magisterio, como organización de base y parte del poder constituyente, nos pronunciaremos y orientaremos las acciones de denuncia y jurídicas que sean necesarias y pertinentes para la defensa de nuestros derechos e intereses.
En este caso específico, nos reservamos el derecho, y así lo anunciamos, de accionar en el entendido de que la salud y la vida de los docentes y de sus núcleos familiares son tan valiosas e importantes como la de cualquier ciudadano. No hay vidas de primera y vidas de segunda importancia, hay vidas y la vida es sagrada.
COLECTIVO MAGISTERIAL ACCIÓN ÉTICA DOCENTE