Con la velocidad de una llamada, la compañía Tigo recibió autorización de la Secretaría de Planeación Distrital para el montaje de una antena de telecomunicaciones en el separador central de la Avenida Circunvalar y más exactamente en la zona próxima al monumento de la Ventana al Mundo.
La decisión es objeto de serios cuestionamientos teniendo en cuenta que la licencia de intervención y ocupación del espacio público fue otorgada sin tener en cuenta las afectaciones del entorno de este ícono de los barranquilleros.
En este sentido, hay quienes consideran que la Secretaría de Planeación se apresuró en el otorgamiento de la licencia, pero sin tener en cuenta a los propietarios del sector, también como eventuales afectados.
La antena tendría una altura de 18 metros y frente a la Ventana al Mundo se convertiría en un verdadero adefesio visual, especialmente para los miles de visitantes que acuden al monumento para la foto del recuerdo.
‘La licencia fue autorizada en el mes de agosto en atención al estudio del sitio y altura, y el separador central está permitido’, agregó el Secretario de Planeación, Pedro Pablo Oliveros.
Sin embargo, manifestó que como todo acto administrativo es susceptible de modificación o revocatoria, con razones que lo justifiquen, teniendo en cuenta el interés general.
Lo cuestionable del caso es que el montaje de la antena nunca fue socializado en el sector, a efectos de conocer las opiniones de quienes resultaren eventualmente afectados. La respectiva Resolución tampoco aparece publicada en la Gaceta Oficial.