Un llamado a la institucionalidad para estructurar un programa integral cuyo objetivo consiste en generar oportunidades de educación y empleo digno a los jóvenes del país para evitar que se vinculen o reinciden en redes que los instrumentalizan en la violencia o la criminalidad, hizo el Defensor del Pueblo, Carlos Camargo.
Su propuesta radica en formar y generar vínculos institucionales y alternativas reales de trabajo en las regiones, de manera especial, en aquellas donde la falta de oportunidades, debido al contexto socioeconómico, no les deja otra alternativa a las nuevas generaciones que la de terminar siendo cooptados por los actores armados al margen de la ley.
Carlos Camargo agregó que esta iniciativa debería favorecer, por ejemplo, a los jóvenes más pobres, a los Consejeros de Juventud o a quienes ejercen algún tipo de liderazgo en sus comunidades, a los jóvenes que están cumpliendo sanciones en el Sistema de Responsabilidad Penal para Adolescentes, como un verdadero incentivo a la legalidad y la convivencia pacífica.
Sostuvo que el programa debe estar enmarcado en una estrategia de prevención integral. “Igualmente y no menos importante, que brinde alternativas y le haga frente a la deserción escolar; también necesitamos prevenir que nuestros niños, niñas, adolescentes y jóvenes sean tentados por los actores generadores de violencia en el país”, destacó el Defensor del Pueblo.