El Ejército de Liberación Nacional (ELN) reconoció su responsabilidad en el ataque armado contra el esquema de seguridad del gobernador de Arauca, Renson Jesús Martínez, ocurrido el pasado 10 de noviembre en una zona rural del municipio de Fortul, cerca de la frontera con Venezuela.
A través de un comunicado publicado en su portal web, el Frente de Guerra Oriental ‘Comandante en Jefe Manuel Vásquez Castaño’ admitió que durante un “ejercicio de registro y control territorial”, sus unidades abrieron fuego “con ligereza y precipitud” contra la camioneta en la que se movilizaba el mandatario regional, luego de que esta no acatara la señal de alto.
“Reconocemos pública y autocríticamente nuestro error; sabemos que podría haber tenido un desenlace fatal. Lamentamos profundamente el incidente y ofrecemos disculpas por lo sucedido”, expresó el grupo armado, que anunció indagaciones internas para esclarecer los hechos.
El ELN, que mantiene fuerte presencia en Arauca, aprovechó el comunicado para recomendar a la población civil atender las señales de pare en los retenes que instala en sus zonas de influencia.
El ataque se produjo cuando la caravana del gobernador fue atacada a tiros en la vía Fortul-Tame. Aunque el mandatario resultó ileso, la camioneta blindada en la que se desplazaba recibió varios impactos de bala, según las imágenes difundidas en redes sociales.
La Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos en Colombia rechazó el atentado y pidió a las autoridades investigar, juzgar y sancionar a los responsables.


