El exciclista Luis «Lucho» Herrera, considerado una leyenda del deporte colombiano, enfrenta una investigación judicial por su presunta implicación en un caso de desaparición forzada ocurrido en 2002.
Según reveló este domingo Noticias Uno, dos exintegrantes de grupos paramilitares declararon ante la justicia que Herrera habría solicitado la desaparición de cuatro personas, a quienes señaló como presuntos colaboradores de la guerrilla. Los hechos habrían ocurrido en octubre de ese año, en el departamento de Casanare.
Los testimonios fueron proporcionados por alias ‘Ojitos’ y alias ‘Menudencias’, quienes aseguraron que, por orden del entonces comandante paramilitar Martín Llanos, ejecutaron el pedido del exciclista. Herrera, según narraron, les habría entregado fotografías de las supuestas víctimas junto con una suma de dinero para facilitar el crimen.
«Me ofreció algo de tomar y me entregó dos sobres de manila. En uno estaban las fotos de cuatro personas que debíamos recoger, según él eran milicianos que querían secuestrarlo. En el otro había 40 millones de pesos», contó alias ‘Ojitos’ en su testimonio.
Las personas señaladas como víctimas son los hermanos Rodríguez Martínez, Diuviseldo Torres y Gonzalo Guerrero. ‘Menudencias’ confesó haber participado directamente en el asesinato y reveló que los cuerpos fueron enterrados en una finca cercana a la vía Novilleros–Aguadita, presuntamente propiedad de Herrera.
Según la declaración, tiempo después se descubrió que los desaparecidos no tenían vínculos con grupos armados ilegales y que el móvil habría sido un conflicto por tierras vecinas al predio del exciclista.
El pasado 7 de abril, el Juzgado Cuarto Penal del Circuito de Fusagasugá ordenó abrir una investigación formal contra Herrera con base en los testimonios recogidos en el expediente.
